Hallazgo arqueológico detiene obras en Centro de Justicia de Arica
El Poder Judicial finiquitó contrato con la constructora tras descubrir momias chinchorro.
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Un término anticipado del contrato de construcción del Centro de Justicia de Arica decidió el Poder Judicial, debido a la necesidad de rescatar momias de la cultura chinchorro encontradas en el lugar.
Las obras estaban a cargo de la constructora Guzmán y Larraín, a la cual se le pagarán las obras ejecutadas por $ 241,9 millones más los gastos generales producidos tras la paralización parcial de las obras, que ascienden a $ 156,2 millones. Según las Actas del Poder Judicial, la firma también solicitaba el pago de materiales como acero, por un valor de $ 29,5 millones, además de otros $ 24,3 millones por obras adicionales.
Sólo hubo acuerdo en el pago de las obras ejecutadas y las adicionales de decapado del terreno.
En esta misma acta, correspondiente a la sesión del 24 de octubre, los ministros consejeros Guillermo Silva, Gloria Ana Chevesich, Manuel Antonio Valderrama y Jorge Dahm, hablaron sobre los daños sufridos por los tribunales durante el estallido social. En el balance se cuentan 48 locales afectados, de los cuales 46 presentaron daños menores, como roturas de vidrios o rayados de muros.
Las dos instalaciones judiciales más dañadas fueron el Centro de Justicia de Puente Alto, que resultó con casi la totalidad de su fachada de vidrio destruida, y la Corte de Apelaciones de Concepción, que debió soportar un incendio en su interior a causa de bombas molotov.
A esa fecha, el Poder Judicial indicaba que ya se habían iniciado las labores de reparación y de medidas de protección de la infraestructura, donde los costos de reparación bordearían los $ 500 millones.